sábado, 31 de diciembre de 2011

Transformación

Hace tiempo que soy consciente de que la vida hay que vivirla al máximo, puesto que uno de estos días será el último y eso viene sin avisos. Sin embargo, todavía no sé cuál va a ser el camino a seguir.

Supongo que a veces las circunstancias provocan situaciones que nos cambian, que nos graban momentos especiales. Puede parecer una tontería, pero esta mañana para desayunar me tomé un tanque de café y una guarrada que me mandan tomar dos veces por semana. La cafeína me afecta mucho y por mis circunstancias actuales, supongo que busco en las drogas (legales) una forma de sentir algo más. No me imaginaba hasta dónde iba a llegar esta vez...

Es difícil de explicar: el cerebro me iba a 1000 por hora, me he puesto hiperactivo y los pensamientos se han sucedido unos tras otros. Todo era positivo, una euforia me embargaba y sentía el mundo alrededor tan intensamente que no podía dejar de apreciar todos los detalles. Me fui a comer con mis padres y estuve hablando de la vida y de montones de cosas. Quería que supieran que aunque todos tengamos problemas, son parte de la vida y soy feliz.

Despues de sentirme así, tan vivo, tan intensamente, tengo la necesidad de no olvidar todo esto y de aprender a sentirme así todo el tiempo posible, aunque mejor sin drogas, claro :)

Me imagino que más de uno andará juzgándome o vete a saber qué. Y también se preguntarán por qué me expongo así públicamente. La verdad, no lo sé. En este momento me da igual. Y nada, no asustarse, porque ha sido un colocón de puta madre pero por encima de todo, una experiencia positiva, ... Y espero que cada cual encuentre la forma de ser más feliz cada día, cada hora, cada minuto. Yo así lo haré.

1 comentario:

Isa dijo...

Me gustan tus nuevas entradas en el blog :-) ¡el principio de un gran cambio! sigue así ;-) y todo lo bueno vendrá rodado! bsss